Hoy se celebra la festividad de la Cátedra de San Pedro, una ocasión solemne que se remonta al cuarto siglo y con la que se rinde homenaje y se celebra el primado y la autoridad de San Pedro.
La palabra “cátedra” significa asiento o trono y es la raíz de la palabra catedral, la iglesia donde un obispo tiene el trono desde el que predica.
Hoy, unidos a toda la Iglesia, recordamos y oramos por el Santo Padre, el Papa Francisco.
Oh Dios, Pastor y guía de todos los fieles,
mira con benevolencia a tu siervo, nuestro papa Francisco,
a quien has puesto a la cabeza de tu Iglesia,
por lo que estamos alegres y agradecidos.
Concédele la gracia de edificarla con su palabra y su ejemplo.
Dirígelo por el camino del Evangelio.
Que inspirado por el Santo Espíritu de la Verdad,
ame con todo su ser, conozca y viva según tu Voluntad.
Te pedimos, Señor, que lo ilumines y lo acompañes,
que le concedas fortaleza, paz y salud en su ministerio.
Que con ánimo alegre y esforzado lo lleve a buen término.
Mantén siempre en él la preocupación por nosotros.
Que sea para tu pueblo digno de constante amor y atención,
y pueda comunicarnos un mensaje de esperanza y de concordia.
Te pedimos por él y por nosotros, para que nos sepamos abrirnos
a lo que por su medio nos quieras transmitir.
Que siempre nos lleve en su corazón y deje sembrados en el nuestro
frutos abundantes de conversión.
Te lo pedimos por Jesucristo, Nuestro Señor. Amen
mira con benevolencia a tu siervo, nuestro papa Francisco,
a quien has puesto a la cabeza de tu Iglesia,
por lo que estamos alegres y agradecidos.
Concédele la gracia de edificarla con su palabra y su ejemplo.
Dirígelo por el camino del Evangelio.
Que inspirado por el Santo Espíritu de la Verdad,
ame con todo su ser, conozca y viva según tu Voluntad.
Te pedimos, Señor, que lo ilumines y lo acompañes,
que le concedas fortaleza, paz y salud en su ministerio.
Que con ánimo alegre y esforzado lo lleve a buen término.
Mantén siempre en él la preocupación por nosotros.
Que sea para tu pueblo digno de constante amor y atención,
y pueda comunicarnos un mensaje de esperanza y de concordia.
Te pedimos por él y por nosotros, para que nos sepamos abrirnos
a lo que por su medio nos quieras transmitir.
Que siempre nos lleve en su corazón y deje sembrados en el nuestro
frutos abundantes de conversión.
Te lo pedimos por Jesucristo, Nuestro Señor. Amen
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