Normalmente, queremos tener las máximas certezas posibles antes de tomar una decisión importante en nuestra vida. En principio, este aspecto es normal, pues a todos nos da miedo equivocarnos. El problema lo encontramos cuando un pequeño porcentaje de inseguridad nos paraliza y nos bloquea. Parece que nos falta fe en nosotros mismos y en Dios.
Sin embargo, el discernimiento cristiano nos invita a descubrir cuál es la voluntad de Dios en nuestra vida y a fiarnos de Él. Siempre tendremos un grado de incerteza en las decisiones que tomemos, pero si hemos buscado la voluntad de Dios sabemos que nunca estaremos solos. Así, con la confianza puesta en Él tendremos la fe y el valor necesario para determinarnos en las decisiones importantes de nuestra vida.
Sin embargo, el discernimiento cristiano nos invita a descubrir cuál es la voluntad de Dios en nuestra vida y a fiarnos de Él. Siempre tendremos un grado de incerteza en las decisiones que tomemos, pero si hemos buscado la voluntad de Dios sabemos que nunca estaremos solos. Así, con la confianza puesta en Él tendremos la fe y el valor necesario para determinarnos en las decisiones importantes de nuestra vida.
E. Ignaciana
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