LO QUE SOBRA Y LO QUE FALTE...


Sobran “días de ira”. Sobran jornadas de viejo odio y pesadas piedras, de insensatos cohetes y bruta represión. Sobran muros, asentamientos, intifadas… Falta una torre que llamará orar a todos los hijos de Dios por igual. Urge un altar ante el que se postren los de las piedras y los de los fusiles. 
Jerusalem no es ni tuyo, ni mío. Todas las tierras son santas. La Nueva Jerusalem que estamos construyendo no es ni cristiana, ni musulmana, ni judía. La nueva Jerusalem que hombro con hombro, corazón con corazón estamos levantando es de todos los hombres y mujeres por fin decididos a vivir en paz, unión y fraternidad.
* Imagen de Jerusalem con sus sagrados y emblemáticos templos de las tres grandes religiones del Libro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario