NOS NECESITAMOS LOS UNOS A LOS OTROS


Vivimos un tiempo muy extraño. Se nos dice que volvemos a una “nueva normalidad”. Sin embargo, la incertidumbre sigue en el ambiente, no podemos hacer grandes planes sobre el futuro y, además, nuestras relaciones sociales han cambiado en algunos aspectos, pues aún debemos guardar ciertas medidas sanitarias.

Seguramente, estos meses nos han ayudado a descubrir la importancia de nuestra dimensión social. Nos necesitamos los unos a los otros y queremos vernos físicamente, sin pantallas. Es cierto que aún no podemos darnos la mano, abrazarnos o darle un beso a un ser querido. No obstante, de otra manera podemos aprender a dejarnos tocar por los demás y también por Dios. 

A pesar de todo, el sufrimiento y la alegría de las personas que nos rodean todavía pueden llegar a nuestro corazón y a nuestra oración. Aún tenemos muchos motivos para rezar por personas que lo necesitan, ofrecerle a Dios sus nombres para que Él pueda tocarlos y sanarlos.

E Ignaciana

No hay comentarios:

Publicar un comentario