MARÍA


Entre los personajes cercanos a Jesús, pocos como María. De ella no se dice mucho en los evangelios, pero lo que se dice es sorprendente. Madre, testigo, seguidora… Una mujer fiel a Dios, y capaz de ver más allá de lo cotidiano y establecido. Una creyente capaz de arriesgarlo todo. Una mujer valiente. Mucho más que un 'icono', mucho más que una idea, mucho más que un nombre… de ti decimos que eres madre.

Donde todos hubiesen visto una locura, María vio un horizonte. Donde muchos hubiesen visto una trasgresión, ella intuyó la promesa de Dios. Donde tantos se hubiesen estremecido ante la perspectiva y hubiesen exigido más pruebas, más seguridades o más garantías, ella exclamó: «Hágase». Donde la ley era la referencia y la condena, ella fue capaz de cantar la grandeza del Dios que está con los más pequeños y da la vuelta a todos los órdenes establecidos. Donde todo era convencional, María, con una acogida hecha al tiempo de ignorancia y valentía, de confianza y entrega, fue capaz de colaborar con Dios de un modo radical.

Pedimos a Dios, a imagen de María, ser capaces de decir en nuestra vida: «Hágase».

Pastoralsj

No hay comentarios:

Publicar un comentario