NO TE CONVIERTAS EN TU REFERENTE


Vivimos en un mundo con grandes ansias de poder. Todos quieren triunfar en esta vida y ser recordados por el éxito que cosecharon. Es más, parece que si no se han producido grandes hazañas en nuestra biografía es como si nuestra vida no hubiese tenido sentido. Este tipo de conductas nos llevan a ser individualistas y a convertirnos nosotros mismos en nuestro propio referente. Así es el mundo en el que vivimos cotidianamente.

Sin embargo, Jesús nos presenta como referente a un niño. Nos dice que nos debemos hacer como uno de los pequeños. Personas humildes que no confían en sus propias fuerzas, sino en las de Dios. Seres humanos que conocen sus limitaciones y, por ello, ponen sus esperanzas sólo en Él. Así pues, seamos humildes, esperanzados, conectados en todo momento con Jesús y, de este modo, daremos un testimonio de fe ante el mundo que nos rodea.

E Ignaciana

No hay comentarios:

Publicar un comentario