¡VEN, SANTA RUAH!


Despierta nuestra débil y vacilante fe,
riega nuestra pequeña esperanza,
anima y caldea nuestro amor cansado.
Enséñanos a vivir confiando
en la insondable ternura de nuestro Padre Dios.
que abraza a todos sus hijos e hijas,
estén dentro o fuera, salgan o vuelvan.

¡Ven, santa Ruah!
Que Jesús sea eje, motor y centro de tu Iglesia;
y que nada ni nadie oscurezca su presencia.
Danos a conocer su evangelio cada día
y anímanos a ser discípulos enamorados.
Haz que todos nuestros proyectos y vida
sean una aventura campo a través
gozando la creación y la amistad a cada instante.

¡Ven, santa Rua!
Abre todos nuestros sentidos a tus llamadas;
a las que nos llegan desde los interrogantes,
conflictos, contradicciones y sufrimientos
de los hombres y mujeres de nuestros días,
y a las que nos llegan a través de sus gozos,
alegrías, descubrimientos y esperanzas.
Enséñanos a acoger los signos de los tiempos.

¡Ven, santa Rua!
Fuérzanos a vivir expuestas a tu brisa y fuego
para engendrar la fe -viva, nueva, sugerente-
que necesita esta sociedad nueva.
Que tu Iglesia sea y esté más cercana y atenta
a lo que nace y florece que a lo que languidece;
que sus entrañas se muestren abiertas y amasadas
por la esperanza, y no por la nostalgia.

¡Ven, santa Ruah!
Enséñanos a mirar, en estos momentos de crisis,
de manera nueva la vida, el mundo y las personas.
Que nuestro mirar sea como Jesús miraba
y sepa detenerse, con misericordia y ternura,
en los que sufren, lloran y son víctimas,
en los que caen, viven solos y son olvidados
en rincones oscuros o en plazas públicas.

¡Ven santa Ruah!
Haznos personas abiertas y compasivas
que expresemos nuestra indignación y esperanza
junto a todos los que ven truncado su futuro
por la prepotencia y mala gestión de los de siempre;
que acampemos solidariamente con el 15-M
manteniendo encendida la llama de un futuro mejor
hasta que brille tu sol de justicia en rincones y plazas.

¡Ven, santa Ruah!
Envíanos a ser luz que ilumina,
fuego que acrisola y purifica,
llama que danza y resplandece,
hoguera que quema las vanidades,
ascuas que atraen y calientan,
y si quieres que lleguemos hasta la muerte,
cirio de pascua que abre horizontes.

Florentino Ulibarri


No hay comentarios:

Publicar un comentario